¿Dónde fue a parar el material que di?
Desde PRO hemos buscado poder darle una segunda vida al material usado que nos habéis ido donando todo este tiempo. Por este motivo, el Centre d’Acollida Assís y la Llar de Pau han sido los sitios que hemos escogido para hacerles entrega de todo este material.
Centre d’acollida Assís
Encontramos en este centro un escenario apropiado para poder ofrecerle todo tipo de material que pudiese serle útil a un organismo que se encarga de luchar contra la pobreza y la exclusión social. Trabajan para personas sin hogar; les asean, les dan comida…en definitiva, persiguen poder alejarles de la exclusión permanente en la que viven y darles alternativas para que se vuelvan a integrar en la sociedad para llevar una vida más digna.
Nuestra contribución -que es la de todos vosotros- pasó por la donación de bolsas de ropas, calzado y material sanitario (tiritas, jabón y agua oxigenada).
Queremos agradecer a Jesús, el encargado, que a nuestro parecer es una persona muy válida y digna de mención, la manera como nos trató y como recibió con las manos abiertas nuestra pequeña aportación. Además aprovechamos para darnos un paseo junto a Jesús por el centro donde pudimos constatar que el pasado 24 de noviembre del 2010, el centro fue premiado con la medalla de honor de l’Ajuntament de Barcelona por su tarea desinteresada hacia este sector poblacional.
Un gran reconocimiento a una gran labor.
Llar de Pau
Éste es un centro de acogida para mujeres que nació en el año 91 de los esfuerzos de las Hermanas de la Caridad por buscar alternativas a mujeres que recibían el alta hospitalaria y que, condicionadas por su precariedad económica o su exclusión social, se encontraban después sin hogar y sin soporte familiar.
Consiguieron crear un centro de acogida en el que el objetivo, también aquí, era y sigue siendo el de darles una nueva oportunidad para escapar de esta situación marginal y devolverles la dignidad como personas.
Su actuación se centra a través de la atención médica, comida, aseo…para su posterior integración en la rueda social. El esfuerzo de estas religiosas es realmente encomiable y su capacidad de entrega es siempre una motivación para el resto.
Sor Manoli fue la encargada de atendernos y darnos una vuelta por el centro. El entusiasmo que esta mujer desplegó sobre nosotros en todo momento fue una enseñanza de coraje y humildad al mismo tiempo que será imposible de olvidar.
Bolsas de ropa femenina principalmente y material sanitario, fue vuestra y nuestra contribución a este centro.
Darle una segunda vida a las cosas que ya no utilicemos y que creamos que pueden hacer un bien a otra persona está en la mano de cualquiera de nosotros.
Por este motivo, os invitamos y os intentamos motivar para que vosotros mismo tengáis la satisfacción de ayudar a estos u otros centros de la misma índole.
¡Muchas gracias por vuestro esfuerzo e implicación!
Os dejamos aquí sus páginas web:
